¿Qué se puede vender en un estanco?
¿Qué se puede vender en un estanco?
Además del tabaco y el timbre así como otros elementos o accesorios que pueda necesitar un fumador, un estanco puede cubrir aún muchas más necesidades de un cliente. De hecho, otro de los productos típicos que puedes encontrarte un estanco son artículos de papelería y librería. Todas estas variedades descritas no necesitan de una declaración responsable por parte del estanquero ya que al haber cumplido con todos los requisitos para abrir un estanco, está completamente autorizado para ello.
Por otro lado, tal y como recoge la Unión de Asociaciones de Estanqueros de España, si el expendedor está interesado en comercializar terceros productos o servicios, deberá cumplimentar una Declaración Responsable declarando bajo su responsabilidad, que los artículos en los que está interesado en vender no afectan a las propiedades, a la debida conservación y comercialización del tabaco y timbre del Estado así como a la seguridad de los trabajadores y clientes. Para proceder a ello, no será necesario realizar declaración responsable para tener a la venta productos de librería, papelería y artículos de fumador.
Aunque parezca algo bastante lógico, no está de más recordar que estas declaraciones deben cumplimentarse con letras en mayúsculas y que sean totalmente legibles para que su registro no induzca a ningún error.
Asimismo, es necesario que se recoja de forma completa la relación de productos que se quiere tener a disposición del cliente. Es decir, se deben describir de forma detallada y hay que evitar referencias generales tales como “varios o etc.” que impidan la identificación correcta de todos los productos.
El origen de los estancos y la evolución
Si acudimos a la raíz etimológica del término ‘estanco’ podemos averiguar que procede del verbo ‘estancar’, lo que supone la prohibición de vender cierto tipo de productos. Estos productos tan sólo pueden ser gestionados y vendidos bajo la supervisión y permiso del Estado, teniendo lugar tales transacciones comerciales en los locales especificados para ello. Aunque el término “estanco” no ha cambiado, su función principal ha ido evolucionándose y adaptándose a los nuevos tiempos.
Dicho en otras palabras, los estanqueros han tenido que reinventarse y comenzar a incluir nuevos productos en la farmacia. Sobre todo, esta irrupción se dio a partir de que entrara en vigor la ley antitabaco en el año 2005, los estancos se han tenido que reinventar y comenzar a introducir otra serie de productos para poder satisfacer la demanda de sus clientes. Clientes, que no por entrar a un estanco tienen por qué ser fumadores.
¿Qué tipo de productos puedes tener en un estanco?
Pues como muy bien señalaba el diario Expansión a finales del mes de enero de este mismo año, hay quienes han incorporado entre su surtido de productos y servicios la venta de tarjetas de prepago, las transferencias de dinero o incluso la compra de entradas. Piensa cuáles quieres incluir, verifica que cumplen con los requisitos arriba descritos y cumplimenta la declaración.
¡Adelante!
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